Collau Fancuaya
-por San Pedro-



Prolongación de la subida a Yernes hacia Braña Senra, en principio, y al lugar conocido como Cuevallagar, donde tiene lugar una feria de ganado, Collau Fancuaya adquiere nombre y se sitúa en el "mapa ciclista" allá por finales de 2020, cuando su entonces alcalde solicita que sea final de etapa en la Vuelta 2022.  Aquí se hizo un completo reportaje por aquel entonces hablando de las variadas variantes que permiten acometer los poco más de cuatro kilómetros que separan Yernes del collado (Fancuaya) y la Vuelta 2022 ha escogido, quizá, la más regular y dura: la que proviene de San Pedro de los Burros, que consta de un tramo de aproximación (hasta el Llanón) y, seguidamente, los diez kilómetros definitivos desde La Vega Villaldín, con una pendiente media que ronda el 8%.
Iniciamos la medición en San Pedro de los Burros, mismo lugar de inicio de la altimetría que en su día publicamos, aquí, acerca del puerto del Maravio (curiosamente se cumplirán veinte años de aquel único paso por la zona, por el Maravio, con la subida a Fancuaya) y con unos primeros kilómetros más bien suaves (pendientes en torno al 3%, salvo un kilómetro algo más durillo de inicio", por una carretera muy arbolada, sombría por momentos, de asfalto rugoso (primavera de 2022), atravesando pueblos como La Cubia o el mismo El Llanón, donde encontramos el desvío hacia el alto de la Venta de Corredoria (por Noceda) y a Santianes, subidas que permiten bucles y recorridos de muchos kilates.  Una vez en el Llanón  bajamos kilómetro y medio y entramos en La Vega Villaldín, pequeño pueblo donde podría situarse el inicio "real" de la ascensión: a partir de aquí no hay aproximación, sino "puerto en sí". Serán poco más de diez kilómetros, compartidos, en primer lugar, con la carretera que sube al puerto del Maravio, atravesando un pequeño túnel y un "cortado" espectacular donde las rampas ya rondan el 10% y se adivina, colgada arriba a la izquierda, la impresionante "herrradura" del tramo más duro de toda la subida...  Sobrepasado el  kilómetro 11 de subida dejaremos la carretera del Maravio y tomamos la de Yernes a la izquierda. Primeros metros suaves y, luego, con brusquedad, rampas y más rampas del 12, del 13, del 15 y hasta de un 17% por un asfalto en mejor estado, eso sí, en una carretera casi infernal. No se ve Yernes, no se adivina Fancuaya y no se sabe siquiera si hemos tomado la opción correcta... Dos impresionantes "herraduras"  y una brutal recta que se hace interminable nos harán retorcernos sin descanso. Pero tras menos de dos kilómetros (desde el desvío a Yernes), la pendiente cede y alcanzamos Yernes, donde se abre otra fase de la subida: la de Fancuaya. En pleno pueblo se toma el desvío (a la derecha) y las rampas duras arrancarán ya de salida. Serán algo más de cuatro kilómetros que se dibujan en la montaña con una espectacular sucesión de herraduras (ver imágenes) y una irregular sucesión de rampones y breves descansillos, cuyo perfil altimétrico no logra explicar en su justa medida. El tramo final, escénico y duro a partes iguales, cuenta con una herradura final en cemento y otra larga recta cuya pendiente va "in crescendo". Las vistas son espectaculares, sí, y son un justo premio tras el esfuerzo que supone alcanzar esta cima del collau Fancuaya.


Fancuaya debuta en la Vuelta en esta etapa, la octava de la edición, una de las "reinas", sin duda, acompañado de los puertos de Collaona, Mozqueta, Santo Emiliano, Tenebreo o el mismo Perlavia (que no puntúa).

Éste es el perfil de la ascensión:


Y ahora unas imágenes:



La subida, en Google Maps: