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Uno de los puertos más conocidos de la península, que sirve de límite entre las provincias de Soria y La Rioja y que se recorre a través de la carretera Nacional N-111. En la actualidad un túnel, al que se accede a poco más de cinco kilómetros de coronar, permite que el volumen de tráfico que soportaba el puerto haya descendido notablemente y que cualquier cicloturista pueda disfrutar de la parte final, la más bella, con varias curvas de herradura, y que transcurre por una zona muy boscosa.

He situado el inicio del puerto en la localidad de Almarza, a algo más de 17 kilómetros de la cima, y en donde la carretera tiene un cariz ascendente, sí, pero leve (como se puede ver en el perfil). Serán kilómetros de aproximación a la localidad de La Póveda de Soria, donde la ascensión tiene más pinta de puerto y las rampas se incrementan notablemente (bueno, no exageremos). Carretera ancha, impecablemente asfaltada y con arcén en su mayor parte, lo que se agradece, puesto que, como corresponde a una carretera nacional, hay bastante tráfico. Sin embargo, pasado el desvío al túnel, éste disminuye (como señalaba más arriba) muy mucho. A partir de ahí, algo más de cinco kilómetros de serpenteo por la ladera de la montaña hasta alcanzar el antiguo Parador (hoy abandonado) que nos sirve de referencia para ubicar la cima, aunque de ahí hasta arriba aún habrá otros 400-500 metros.

El puerto de Piqueras se corona a 1710 metros de altitud, tras 17,1 kilómetros de continua subida a una media del 3%, si bien desde la Póveda esa pendiente asciende al 4,6%.

Este es el perfil de la ascensión: